
Su origen se remonta a 1919, para ese año ya ha terminado la Gran Guerra y la gente festeja con bailes y cantos el fin de aquella terrible guerra. Sin embargo, a Edwar Honey no le parece nada bien esa forma de celebrar. Por lo que aquel periodista y soldado australiano (que sirvió en el ejercito británico durante la Primer Guerra Mundial) propone dedicar unos minutos de silencio por el primer aniversario del tratado de armisticio que marcó el final de la Primera Guerra Mundial, firmado el 11 de noviembre 1918 en la “hora undécima del undécimo día del undécimo mes”, y así consideró que se rendía un homenaje respetuoso a los fallecidos durante el conflicto.
:o interesante de verdad! jamas se me hubiese ocurrido investigar al respecto!
ResponderEliminarjaja! ni idea tenia de estoxd :D muy interesante! uno ni se hubiese imaginado! :)
ResponderEliminarmuy inspirador la propuesta de Edwar Honey!
ResponderEliminar